alt

Blog

No biodegradación en el agua y toxicidad de los detergentes en la vida acuática
No biodegradación en el agua y toxicidad de los detergentes en la vida acuática

No biodegradación en el agua y toxicidad en la vida acuática 

La biodegradación puede definirse como la destrucción de un compuesto químico por la acción biológica de microrganismos vivos. Los tensioactivos son el ingrediente principal o sustancia activa de un detergente, gracias a la capacidad que tienen de romper la tensión superficial del agua y que permite al detergente emulsionar la suciedad o partículas no polares en el agua. Para el caso de los tensioactivos como moléculas a degradar, son los microrganismos vivos que cumplen esta función, principalmente bacterias presentes en los diversos medios que reciben las aguas residuales, que son capaces de alimentarse de una gran variedad de compuestos orgánicos. Los ingredientes de los detergentes que son más importantes que se biodegraden son los surfactantes porqué son tóxicos para la vida acuática, cambian la solubilidad de las grasas y de las proteínas, y en consecuencia alteran el funcionamiento de las membranas celulares de los seres vivos

Todos los surfactantes se pueden acabar biodegradando, pero el grande problema es que lo hacen extremadamente despacio. El gran aumento del uso de los detergentes químicos comprados en los supermercados rende imposible la degradación de los tensioactivos en las aguas residuales. Por ejemplo, los de la familia APE se dejaron de usar en los años ochenta, y en análisis de medios acuáticos hechos en 2003 todavía se encontraban rastros, 5 según un estudio hecho para la Comisión Europea. El año 2004 la Comisión Europea legisló prohibiendo los surfactantes que no se biodegraden rápidamente en condiciones aerobias, es decir en presencia de oxígeno, que es el caso del agua de los ríos o lagos. En concreto, los surfactantes de los detergentes para uso doméstico se tienen que biodegradar en un 60% en 28 días. Esta reglamentación europea no soluciona el problema de la biodegradación de los surfactantes que siguen aumentando y contaminando las aguas de ríos y mares. 

Biodegradable no significa ecológico: algunos fabricantes utilizan el adjetivo “biodegradable” como reclamo comercial. En muchos casos significa sólo que los productos son tan biodegradables como la ley obliga, que en el caso de los detergentes es menos de lo que la salud de los ríos y mares necesita. 

La Comisión Europea, a exclusión de los surfactantes, no ha reglamentado la biodegradabilidad de otros ingredientes por los cuales no hay ninguna exigencia de biodegradación, pese a que para algunos de ellos hay indicios de toxicidad preocupante y, por lo tanto, no es conveniente que permanezcan en las aguas sin biodegradarse. Y permanecen ahí durante años. Por ejemplo, un fosfonato es crónicamente tóxico para la Daphnia, un crustáceo del plancton que, por sus características, se considera un buen organismo medidor de la ecotoxicidad. Los blanqueantes ópticos más usados, además de no ser biodegradables, según la Agencia Química Europea, «Pueden causar efectos nocivos duraderos a los organismos acuáticos». La Comisión Europea considera que “hay que seguir estudiando” todos estos ingredientes de los que “se sospecha” que son especialmente peligrosos para la salud de los ríos. Pero sin aplicar mientras tanto el principio de precaución.

No biodegradación en los lodos y toxicidad en la agricultura 

Los lodos de las depuradoras de aguas residuales son un medio anaerobio: no hay oxígeno. En las depuradoras, buena parte de los surfactantes se precipita hacia el lodo del fondo y buena parte de estos lodos se usa (previo tratamiento) como abono para la agricultura y la jardinería. Los ingredientes que no se biodegradan sin oxígeno, entre los que se encuentran los surfactantes más usados (los de la familia LAS) llegan intactos al suelo agrícola intoxicándolo.

Espuma 

En las plantas de tratamiento de agua la gran cantidad de espuma provoca problemas de operación, afecta la sedimentación primaria ya que engloba partículas haciendo que la 6 sedimentación sea más lenta, dificulta la dilución de oxígeno atmosférico en agua y recubre las superficies de trabajo con sedimentos que contienen altas concentraciones de surfactantes, grasas y proteínas.

Eutrofización 

La eutrofización es una afectación importante de los ecosistemas acuáticos, debida a una llegada exagerada de nutrientes, principalmente fosfatos y nitratos, que causa una explosión vegetativa de algas (fitoplancton). La problemática es tan grave que muchos fabricantes dejaron ya hace tiempo de poner fosfatos en los detergentes para ropa, incluso de manera voluntaria. No fue hasta 2012 que la Comisión Europea introdujo un reglamento que solo limita la cantidad de fósforo en los detergentes, y dejó que, para los detergentes para lavavajillas, el límite no entró en vigor hasta 2017.

Referencia 

Ethan, 2017, https://www.safehouseholdcleaning.com/the-trouble-with-laundry-detergents/